Cuando estás en el filo de lo oscuro
y le rindes honor desde tus huesos
cuando el alma purísima del ocio
pide socorro al universo inútil
cuando subes y bajas del dolor
mostrando cicatrices de hace tiempo
cuando en tu ventanal está el otoño
aún no te despidas / todo es nada
son señales de humo / apenas eso
tu mirada de viaje o de desiertos
se vuelve un manantial indescifrable
y el silencio / tu miedo más valiente
se va con los delfines de la noche
o con los pajaritos de la aurora /
de todo quedan huellas / pistas / trazas
muescas / indicios / signos / apariencias
pero no te preocupes / todo es nadas
on señales de humo / apenas eso
no obstante en esas claves se condensa
una vieja dulzura atormentada
el vuelo de las hojas que pasaronl
a nube que es de ámbar o algodón
el amor que carece de palabras
los barros del recuerdo / la lujuria
o sea que los signos en el aire
son señales de humo / pero el humo
lleva consigo un corazón de fuego
Mario Benedetti, en “Buzones de tiempo”
1 comentario:
Gracias
Publicar un comentario